Durante nuestra carrera profesional muchas veces nos olvidamos que tenemos una persona enfrente nuestra con una vida delicada y construida por experiencis propias y nuevas, una distinta de la otra, nosotros con nuestros conocimientos estamos más apresurados en etiquetarlos con alguna clasificación del DSM, o algun termino psicologico, aplicar la ultima tecnica conocida,o simplementes verlos como clientes y no de pacientes, nos apresuramos en este viaje sin darnos el tiempo de contemplar a quien tenemos en frente, es una vida importante tanto para si mismo como para las personas que estan detras de ella,extiendo una invitacion a crear nuevos psicologos y nuevas personas entregando a nuestros hijos un mundo mas cercano y mas autentico. Jaime Garrido A. Psicologo Clinico
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarDurante nuestra carrera profesional muchas veces nos olvidamos que tenemos una persona enfrente nuestra con una vida delicada y construida por experiencis propias y nuevas, una distinta de la otra, nosotros con nuestros conocimientos estamos más apresurados en etiquetarlos con alguna clasificación del DSM, o algun termino psicologico, aplicar la ultima tecnica conocida,o simplementes verlos como clientes y no de pacientes, nos apresuramos en este viaje sin darnos el tiempo de contemplar a quien tenemos en frente, es una vida importante tanto para si mismo como para las personas que estan detras de ella,extiendo una invitacion a crear nuevos psicologos y nuevas personas entregando a nuestros hijos un mundo mas cercano y mas autentico.
ResponderEliminarJaime Garrido A.
Psicologo Clinico
y un buen psicólogo no pretende dirigir al otro... sólo lo acompaña al encuentro de si mismo
ResponderEliminar